El Gallo no levanta cabeza. Empató sin goles como local ante Brown de Puerto Madryn, el último del certamen, y llegó a los seis partidos sin victorias. El equipo de Lucas Bovaglio protagonizó uno de los peores encuentros del ciclo ante un rival que todavía no sumó de a tres en el campeonato, por lo que el cero a cero reflejó perfecto la situación de ambos en el torneo.
La derrota en Rafaela caló hondo en el Oeste, y es por eso que el encuentro ante Brown de Madryn se presentaba como una bisagra para la continuidad del entrenador. Con el regreso de Matías Mansilla al arco, y la salida de Matías Gómez para el ingreso de Alan Salvador, el Gallo buscó dejar de lado los fantasmas y conseguir un triunfo para repuntar desde lo anímico.
Sin embargo, lejos estuvo Morón de ser aquel elenco que, con errores, proponía un esquema ofensivo y generaba peligro en el arco rival. Durante los primeros 45 minutos no pudo hilvanar una jugada en ataque y prácticamente no llegó a inquietar a Franco Agüero, guardameta de los patagónicos.
En el complemento, ya sin Salvador, pero con Gómez volcado sobre la izquierda, Bovaglio intentó mover las fichas para reponerse de un primer tiempo apático y timorato. Pese a esto, el ex hombre de Gimnasia no aportó lo necesario para cambiarle la cara a un elenco que no encontró respuestas en la intermitencia de Santiago Nagüel y las pocas apariciones de Luciano Guaycochea y Agustín Mansilla.
Ni Morón, ni Brown, con el debut de Nicolás Vazzoler como DT, tuvieron el ingenio, la lucidez y el juego para quebrar el cero, por eso es que el duelo culminó sin goles, lo que expuso su andar en el campeonato.
Es cierto que a lo largo del certamen el Gallo hizo méritos para tener algún punto mas, pero también es válido mencionar que en esta ocasión lo que le privó a Morón sumar de a tres no fue la fortuna o un error propio. En el peor momento del ciclo de Lucas Bovaglio, el equipo retrocedió en cuanto al juego, y ante la variedad de nombres y la continuidad de los encuentros, parece entrar en una situación, hasta el momento, sin salida.
Síntesis
Morón: Mansilla; Broggi, Paz, Verón, Bontempo; Palmieri, González; Nagüel, Guaycochea, Salvador; Zárate. DT Lucas Bovaglio
Brown PM: Agüero; Ruiz Díaz, Herranz, Albarracín, Ferracuti; Assenato, Juárez, Sivetti; Blanco; Parisi, Bahamonde. DT Nicolás Vazzoler
Amonestados: Nagüel (M) - Paz (5ta)(M) - Gómez (M) - Ferracuti (B) - Juárez (B)
Cambios Morón: Gómez x Salvador 0 ST/ Mansilla x Guaycochea 18 ST/ Villalba x Nagüel 30 ST/ Akerman x Zárate 43 ST
Cambios Brown PM: Benega x Assenato 16 ST/ Belinetz x Bahamonde 16 ST/ Ahumada Acuña x Blanco 24 ST/ Lacunza x Juárez 29 ST
Árbitro: Julio Barraza
Mariano Sebastián Rey - @MarianoReyOK
No resiste mucho más análisis.
ResponderBorrarDesde el partido con All Boys y después con Ferro dijimos "ojo el arquero", "ojo los centrales", "necesitamos más de Palmieri", "necesitamos que Pacheco esté bien", "no hay 9"...
2 meses después lo único que hicimos fue profundizar esas carencias.
Lamento que los refuerzos no sean lo esperado, lamento aún más que la idea del D.T. que parece buena en el pizarrón no se plasme y lamento muchísimo más que jugadas 9 fechas estemos casi out de todo.
También me da la sensación que la ida de Bovaglio no cambiaría mucho.
No entiendo la apuesta de Pacheco siendo que jugo 10 min por partido y la vez que jugó 60 min se lesiona.
No entiendo encarar un torneo con Villalba y Zárate de 9, una apuesta y otro que no anduvo antes.
No me gusta que se deje de lado a los Bracamonte, Sala, Ledesma, Pachu, Nuñez, Kubiszyn...
No me gusta el boludeo a Akerman poniéndolo 4 minutos.
Como está planteado esto es un año perdido y ni siquiera te deja una base para 2022.
Viraje de timón urgente para que no tengan que rezar empatar con la reserva de Flandria para no bajar, como ya pasó